El filtro de aire

El filtro de aire es posiblemente uno de los elementos del vehículo con un mantenimiento más fácil y económico pero no creas que por ello tiene una menor importancia, todo lo contrario, a través de este filtro nuestro vehículo toma el aire necesario para quemar el combustible adecuadamente, si este filtro se encuentra en malas condiciones provocará un mal funcionamiento del motor que finalmente terminará por provocar averías más graves.

Un filtro sucio deja pasar una menor cantidad de la sustancia que filtra, en este caso el aire (con el oxigeno necesario para el motor), esta falta de oxigeno provoca una mala combustión del combustible y a su vez esta mala combustión produce un mayor consumo (+ €), una mayor producción de gases contaminantes que estaremos lanzando a la atmósfera y por lo tanto respirando todos y una mayor producción de residuos en el motor que pueden provocar averías mayores como la obstrucción de la válvula EGR encargada de la recirculación de gases dentro del motor, deterioro del sistema de escape (sobretodo de los actuales filtros de partículas), desgaste prematuro de componentes del motor...

Es especialmente importante mantener el filtro de aire en buenas condiciones cuando se transite por lugares elevados, dado que cuanto mayor es la altitud, menor la cantidad de oxigeno disponible, con lo que un filtro limpio ayudará a mantener un buen flujo de aire hacia el motor.

Un filtro excesivamente sucio puede llegar a dejar pasar parte de las las partículas que debe detener y estas provocar averías como fallos en el caudalímetro, que controla parámetros como la temperatura, densidad y cantidad de aire que entra al motor y provocar desgastes prematuros en el motor.

Un filtro deteriorado puede dejar pasar parte partículas suspendidas en el aire que provoquen las averías citadas anteriormente; el mal estado del material filtrante del filtro podría provocar el desprendimiento de partes del mismo que irían directamente dentro del motor, claro que esto son casos extremos y excepcionales de filtros totalmente olvidados y abandonados o de muy baja calidad.

Intervalos de mantenimiento

El ciclo de sustitución o limpieza dependerá de cada vehículo y fabricante. Los primeros factores que influyen en la vida del filtro tienen que ver con el diseño del vehículo; la colocación de la caja del filtro, su tamaño, de que zona recoge el aire, son los primeros factores que determinarán el ciclo de sustitución o limpieza del filtro y es posible que por diversas razones durante el diseño del vehículo no sean todo lo idóneos que debieran.

El siguiente factor que determinará el intervalo entre mantenimientos es el tipo de uso del vehículo y las vías por las que transita, aunque el fabricante ya nos indicará unos ciclos de sustitución o limpieza más cortos si el vehículo transita por vías o condiciones adversas, debe ser el usuario el que juzgue el momento de la sustitución o la limpieza.

Consideraremos condiciones ideales de funcionamiento del vehículo cuando se circule por vías con poco polvo, un ambiente con una humedad relativa media y con el motor poco exigido que normalmente circule a velocidades o cargas medias, a partir de aquí si cualquiera de estas condiciones empeora (circular con mucho polvo por ejemplo), la frecuencia del mantenimiento deberá de aumentar.

Por regla general es suficiente cambiar el filtro cuando lo indique el fabricante y solo vehículos que transitan por caminos de tierra con mucho polvo o barro como motos de campo y todo terrenos deben tener más cuidado y aumentar el mantenimiento. Vivir y transitar en determinados sitios, climas tropicales o desérticos también nos obligará a acortar el mantenimiento. Los fabricantes suelen indicar en sus manuales de mantenimiento en que zonas los intervalos de mantenimiento deben ser mas cortos.

Una cifra orientativa de cuando sustituir el filtro podrían ser 20.000 Km o dos años en condiciones normales de uso y la mitad en condiciones severas, a mitad de este periodo, es decir a los 10.000 Km o un año se debe revisar y comprobar su estado, limpiando o en el peor de los casos sustituyendolo si fuera necesario (no debería), pero repito que es el fabricante el que determina los intervalos de mantenimiento recomendables pues puedes encontrar vehículos que necesiten cambios o al menos limpiezas cada 5.000 km o menos y otros de última generación con cambios cada 40 o 50.000 Km.

Si tomamos como ejemplo una moto de campo o un 4x4 circulando por pistas con polvo y barro, debe limpiar el filtro muy a menudo (digo limpiar por que suelen ser filtros lavables, al menos en las motos), por el contrario cualquier coche con un uso medio-bajo, que circule con condiciones ideales podría cambiar el filtro más allá del periodo indicado de mantenimiento sin problemas.

Tipos de filtros

Los filtros originales o genéricos que están hechos de papel, fibras o ambas, también de esponja en algunos casos y diseñados por y para el vehículo al que van destinados, si son los originales serán iguales que el filtro que trae el vehículo de origen, si son de la industria auxiliar serán totalmente compatibles pero puede diferir su diseño. Tienen una vida útil determinada ya que su limpieza es muy limitada y deben se cambiados en el mantenimiento, salvo los de esponja que si permiten ser limpiados y reutilizar un cierto número de veces.

Otro tipo de filtros, los llamados de alto rendimiento, competición, de algodón o abiertos, que suelen ser lo mismo, son un tipo de filtro que sustituye al de origen y está formado generalmente por algodón trenzado en múltiples capas, recubierto con una malla e impregnado con aceite de baja viscosidad que ayuda a detener y retener la suciedad. Estos filtros son bastante más caros en su adquisición que los genéricos o originales, pero son reutilizables, pues en vez de sustituirlos basta con lavar, secar e impregnar con aceite nuevo (con los productos específicos) para que estén a pleno rendimiento de otra vez, así que es posible amortizar y revalorizar su sobrecoste con el tiempo, además este tipo de filtro mejora la capacidad de aspiración de aire en comparación con los filtros tradicionales. El fabricante del filtro es el que indica los intervalos de mantenimiento pero el usuario es el que debe controlar estos intervalos dependiendo del uso y vías por las que se transite, por si fuese necesario acortar los periodos de limpieza.

Junto con estos últimos también existen los kits de inducción directa que se instalan en la mayoría de motores sustituyendo la caja de aire de serie y que van desde un simple filtro cónico conectado directamente a la admisión, hasta sistemas más complejos formados por separadores que protegen el filtro del calor del motor, tuberías para conducción del aire, cajas de aire específicas con diseños que prometen un mayor flujo de aire hacia el motor...

Los kits de inducción sobre todo y en menor medida lo filtros de alto rendimiento son elementos que solo recomendaría montar si va ha existir una preparación del motor posterior, como mínimo una reprogramación de la centralita que verdaderamente pueda aprovechar esa mayor entrada de aire al motor, de no ser así posiblemente podamos empeorar el rendimiento del motor. Si no hay una reprogramación pero quieres sustituir el el filtro original por sus otras ventajas como el que es reutilizable y ya no tendrás que cambiarlo por ejemplo, limítate a sustituir el original por el equivalente en alto rendimiento, es posible que hasta se note mejora en ciertos vehículos cuyas centralitas asimilen ese aire extra de entrada al motor.

Donde y que comprar

Los filtros originales generalmente deberás adquirirlos en el taller de la marca y los equivalentes de la industria auxiliar en cualquier centro de autorecambios o por internet, te recomiendo que montes en tu vehículo marcas reconocidas que te garanticen una buena calidad como puedan ser MANN, BOSCH, MAHLE, PURFLUX, UFI, VALEO y otras menos conocidas que te podrán aconsejar en el momento de la compra, cualquiera de ellas ofrece un producto de calidad y es decisión del comprador decantarse por una u otra, siempre hay detalles que te pueden ayudar en la elección como la inclusión de goma en su borde para que selle mejor al cerrar con la caja por ejemplo, la simple comparación de acabados si te es posible compararlos o resultados anteriores tuyos o de conocidos, serán factores que te ayuden a decidir sobre que filtro comprar.

Aunque particularmente considero que la calidad del filtro de aire es un poco menos importante que por ejemplo un filtro de aceite, te aconsejo no decantarte por segundas marcas o de dudoso origen, el ahorro que puedes obtener en la compra es muy poco y no creo que merezca la pena en relación al daño que pueden provocar si no cumplen su función correctamente.

Si te decantas por un filtro de alto rendimiento deberás buscar en autorecambios un poco más especializados o internet, aunque hay marcas de vehículos que ofrecen estos filtros para algunos de sus modelos más deportivos y estos si debes adquirirlos en el taller de la marca en cuestión. Como marcas experimentadas y de gran calidad en este tipo de filtros se encuentran K&N filters, BMC o PIPERCROSS, rechaza adquirir filtros sin marca o falsificaciones que pueden traer problemas después, como mínimo y como mal menor, en duración y acabados. Cuando compres el filtro aprovecha para hacerte con el kit de limpieza para su mantenimiento y mantener el filtro siempre en buenas condiciones.

Los kits de inducción directa los podrás conseguir en los mismos sitios que los filtros de alto rendimiento y te recomiendo las mismas marcas ya que cuentan con una gran experiencia.